Cualquiera se sentiría a gusto: ya comienza el fin de semana y/o las vacaciones para algunos...
Pero en la 3ª planta de la oficina, (donde estamos los de diseño), la gente se mira con cautela: van 3 viernes seguidos, con un miércoles de propina, que se convierte en el día de las despedidas, tanto personales como profesionales.
Te dejan currar tranquilamente y una hora antes de salir, al que llamen al despacho de RR.HH. sabe que está nominado...
Llantinas, llamadas y mails anunciando el asunto se extienden por el ambiente, aun cuando ni conocemos al despedido/a... pero el un poco violento ver cómo le dicen a alguien que se va al paro de un día para otro.
Hasta donde yo sé, todos tenemos contratos por obra y servicio, lo que significa que el día menos pensado estás en la calle.
Ni 15 días de cortesía
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