Saqué el morro sin mirar entre dos coches aparcados y un señor que circulaba me embistió.
No fue nada, salimos airosos, hicimos nuestro parte y tan amigos.
Fue culpa mía y no lo discutí en ningún momento...de hecho el señor salió de su coche disculpándose por no haberme esquivado, a lo que le tuve que responder que el que se disculpaba era yo por ser tan patán.
El caso es que me dio en la rueda y se me ha torcido la dirección.
Al llamar al seguro, me dijeron que disponía de coche de sustitución, así que cuando lo llevé al taller, pregunté que cómo iba eso del coche de sustitución.
La señora del taller, después de reírse por mi inocente, (y claramente inexperto) intento de tener un coche de esos en el mismo día me dice:
"No hijo, eso hay que pedirlo con antelación"
Gracias señora, no tenía planeado chocarme hoy.
Creo que la señora no pretendía decirte que tenías que pedirlo antes de tener el porrazo, sino antes de llevar el coche al taller, para que lo tuvieran preparado ;)
ResponderEliminarclaro es que es difícil ver com claridad cuando tienes un día negro
ResponderEliminarCuando suceden estas cosas, parece que todo va mal...y es normal que cosas como prestar un coche de sustitución no sea tan fácil, y tengamos que pedirlo antes de llevar el coche al taller...para dejar cosas mal, pero para quitártelas bien jaja, es lo de siempre.
ResponderEliminarCuando suceden estas cosas, parece que todo va mal...y es normal que cosas como prestar un coche de sustitución no sea tan fácil, y tengamos que pedirlo antes de llevar el coche al taller...para dejar cosas mal, pero para quitártelas bien jaja, es lo de siempre.
ResponderEliminar