El lunes, para empezar bien la semana, estampé el móvil contra el suelo en un intento fútil de atraparlo en el aire mientras caía de mi bolsillo.
¿Resultado?
Smartphone 0 - Suelo 1
Ahora sobrevivo con un antiguo móvil liberado que conservaba para casos como estos a la espera de adquirir un nuevo smartphone...
Es increíble lo tedioso que me resulta ahora todo. No tengo el correo en el móvil, no tengo Whatsapp ni nada de nada...
Ayer mi mujer me mando un sms y me hizo hasta ilusión por la añoranza...
En realidad hace 5 años era lo último de lo último y te sentías satisfecho con una cámara de 2 megapíxeles, una pantalla a color y que sonaran los politonos variados...
Es que a todo lo bueno se acostumbra uno.
Mira que yo critiqué en su día el uso excesivo de los móviles, mantengo que no hay que abusar y procuro no hacerlo... pero yo ahora me siento cojo... ¿No será demasiada dependencia?
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