martes, 24 de julio de 2012

Sentirse desnudo

Es curioso cómo cualquier cosa te puede hacer sentir desnudo.

Este fin de semana, como ya sabéis, he estado en Sevilla, con mis amigos del alma, yendo al cine y jugando al rol, visitando los banquitos del barrio donde nos reuníamos cuando no teníamos ni plan ni dinero...

El caso es que justo antes de salir de mi casa, fregué unas tazas y me quité la alianza como hago siempre para no estropearla ni rozarla...

pero como iba con prisas, salí de casa sin ella y me di cuenta en el coche camino a coger el tren...

Y me tiré todo el finde sintiéndome desnudo por no llevarla.

La buscaba con los dedos, iba a juguetear con ella mientras veíamos la peli, la extrañaba por las noches al acostarme...

Es un anillo, lo sé, (díganselo a Gollum) pero estoy tan acostumbrado a él, a llevarlo, a lo que significa, que sin él, me sentía completamente desnudo sin que nadie se percatara de ello...


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